Para efectos de este debate, la aplicación de la vacuna del SARS-CoV-2 puede darse de dos maneras:
A) Aplicación gratuita y segura a las personas pertenecientes a grupos biológicamente vulnerables (personas que sufren de hipertensión, diabetes, asma/problemas respiratorios, adultos mayores, etc). Las personas que no pertenezcan a este grupo y quieran vacunarse, deberán pagar por esta; con el dinero recaudado se financiará la aplicación gratuita de esta alternativa.
B) Una aplicación estratificada que ponga su enfoque en cobrar significativamente menos a las personas que se encuentren en vulnerabilidad económica, y subir el precio en proporción a los recursos de la persona (a mayor riqueza, mayor precio), subsidiando entonces la disminución de costo de las vacunas más baratas con la aplicación de la vacuna de las clases más privilegiadas.